El grupo de Investigación de la científica danesa Anne Sofie Bogh han encontrado que la aplicación diaria de estimulación magnética pulsada (PEMF) por 8 semanas en pacientes con enfermedad de Parkinson (PD) tiene un efecto positivo en los síntomas motores de la enfermedad y por ende mejor la calidad de vida de los pacientes.
En el estudio llevado a cabo en 2018 [1], se reclutaron a 97 pacientes que fueron divididos en dos grupos: a) grupo PEFM activo y grupo PEFM activo y b) grupo PEMF placebo. Ambos grupos recibieron evaluaciones antes y después de tratamiento por medio del cuestionario de autoevaluación de la enfermedad de Parkinson. El grupo activo recibió 30 minutos de terapia PEMF con un sistema multibobinas (figura 1) a frecuencias de 50 Hz e intensidades de 5-8 mT (80 Gauss). Por su parte, los participantes del grupo placebo usaron el sistema de multibobinas los mimos días y por el mismo tiempo, pero ninguna magnitud de pulsos magnéticos fue dispensada. Los resultados de este estudio mostraron que el grupo activo PEMF tuvo valores del cuestionario en el rango de síntomas motores con mejoría respecto al placebo. Además, los pacientes al tener un mayor control motor reportaron una mejoría en la ejecución de las actividades diarias (tales como comer, vestirse, asearse, etc).
Figura 1. Posición del sistema de multibobinas para la aplicación de PEMF en pacientes con Enfermedad de Parkinson. El sistema consta de 7 bobinas de estimulación distribuidas de la siguiente forma: 2 en los lóbulos frontoparietales, 2 en los lóbulos fronto-temporales, 2 en los lóbulos temporales y 1 en el lóbulo occipital.
Newsletter informativo Volumen I, Mayo 2019
En continuación al estudio previo, los investigadores llevaron a cabo un segundo estudio en 2019 [2], en el que reclutaron a 50 pacientes con PD unilateral (síntomas motores en un solo lado y fueron divididos en grupos de tratamiento y placebo. El tratamiento con PEMF procedió de la forma anteriormente explicada por 8 semanas. Los resultados mostraron que el temblor en el grupo con temblores unilaterales disminuyó con mayor significancia estadística que en el grupo con PD bilateral (figura 2).
Figura 2. Cambios en el temblor unilateral en pacientes con PD después de ocho semanas de tratamiento con PEMF. El grupo T-PEMF, mostró una disminución considerable en las escalas de temblor con respecto al grupo placebo. Adicionalmente, los valores de temblor disminuyeron a tal grado que pudieron ser comparados con un grupo control (Pacientes sanos).
Las conclusiones de los autores puntualizan que la terapia PEMF puede funcionar como un coadyuvante de las terapias clásicas de la PD debido a su bajo índice de efectos adversos encontrados en ambos estudios. Es importante recalcar que existen más reportes de los efectos de la terapia PEMF en PD con diferentes posicionamientos de la bobina. Se sugiere realizar una estandarización para el sitio adecuado de tratamiento.
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[1] Bo Mohr Morberg, MD, Anne Sofie Malling, MSc, Bente Rona Jensen, PhD, Ole Gredal, MD, Per Bech, MD, and Lene Wermuth, M. (2018). The effects of Transcranial Pulsed Electromagnetic Field stimulation on quality of life in Parkinson’s Disease. European Journal of Neurology, 25(17), 963.
[2] Sofie, A., Malling, B., Morberg, B. M., Wermuth, L., Gredal, O., Bech, P., &Jensen, B. R. (2019). The effect of 8 weeks of treatment with transcranial pulsed electromagnetic fields on hand tremor and inter-hand coherence in persons with Parkinson ’ s disease, 2, 1–10.
