El tinnitus o acúfeno es comúnmente descrito como un timbre o silbido en los oídos que también puede sonar como un rugido, chasquido, siseo o zumbido. Puede ser desde suave hasta fuerte, agudo o bajo y se puede oír en uno o ambos oídos.
En 2016, aproximadamente el 10 por ciento de la población adulta de los Estados Unidos experimentó tinnitus con una duración de por lo menos 5 minutos. Esto equivale a unos 25 millones de adultos en este país.
Cabe señalar que el tinnitus no es una enfermedad, es un síntoma de que algo está mal en el sistema auditivo. El sistema auditivo incluye el oído, el nervio auditivo que conecta el oído interno con el cerebro y las partes del cerebro que procesan el sonido. El tinnitus puede ser causado por algo tan simple como acumulación de cera (cerumen) que bloquea el canal auditivo o también puede ser el resultado de una variedad de problemas de salud, tales como:
- tumores cerebrales
- infecciones del oído y de los senos paranasale
- enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos
- cambios hormonales en las mujeres
- anormalidades de la tiroides
- pérdida de audición inducida por el ruido
Hay varios factores donde se desarrolla el tinnitus, en ocasiones el tinnitus es la primera señal de sordera en las personas mayores, también puede ser un efecto adverso de los medicamentos, se conocen más de 200 medicamentos que causan tinnitus, ya sea al empezar a usarlos o al dejarlos.
Las personas que trabajan en ambientes ruidosos (como los trabajadores de fábrica o de construcción, los obreros de carretera o incluso los músicos) pueden desarrollar tinnitus con el paso del tiempo.
En 2009, el National Institute on Deafness and Other Communication Disorders (NIDCD) patrocinó un taller que reunió a investigadores del tinnitus con el fin de hablar acerca de este problema y desarrollar ideas novedosas para una posible cura. Durante el transcurso del taller, los participantes trataron sobre las diferentes vías de investigación prometedoras, incluyendo estimulación magnética transcraneal repetitiva (rTMS, por sus siglas en inglés).
Esta técnica, que usa un pequeño dispositivo colocado en el cuero cabelludo para generar pulsos magnéticos cortos, ya se está usando para normalizar la actividad magnética en el cerebro de las personas con epilepsia. Los ensayos preliminares de rTMS en humanos están ayudando a los investigadores a localizar con exactitud los mejores lugares donde estimular el cerebro con el fin de suprimir el tinnitus. Los investigadores también estudian cómo identificar a las personas que mejor responderán a los dispositivos de estimulación.
De acuerdo a esta información se hizo un estudio donde determina si la estimulación magnética transcraneal repetitiva (rTMS) puede reducir la percepción o la gravedad de tinnitus y poner a prueba la hipótesis de que la rTMS dará lugar a una estadística significativamente mayor al porcentaje de pacientes que respondieron al tratamiento en un grupo de rTMS activos en comparación con un grupo rTMS placebo.
Se realizó un estudio aleatorizado, ensayo clínico controlado con placebo de la rTMS con personas que sufren tinnitus crónico. Las evaluaciones de seguimiento se realizaron a 1, 2, 4, 13, y 26 semanas después de la última sesión de tratamiento. El ensayo se realizó entre abril de 2011 y diciembre de 2014 en Portland Veterans Affairs Medical Center entre los 348 individuos con tinnitus crónico que fueron sometidas inicialmente para la participación.
Los participantes recibieron 2000 impulsos por período de sesiones de rTMS activos o placebo a una velocidad de 1-Hz rTMS diaria en 10 días laborables consecutivos.
En total, 18 de 32 participantes (56%) en el grupo de estimulación magnética transcraneal repetitiva activa y 7 de 32 participantes (22%) en el grupo placebo respondieron al tratamiento rTMS.
La diferencia en el porcentaje de pacientes que respondieron al tratamiento en cada grupo fue estadísticamente significativa.
Las conclusiones y relevancia de la aplicación de 1-Hz rTMS al día durante 10 días consecutivos de trabajo resultaron en una estadística y significativamente mayor porcentaje de pacientes al tratamiento en el grupo rTMS activos en comparación con el grupo placebo rTMS.
Las mejoras en la gravedad del tinnitus que experimentaron los pacientes se mantuvieron durante el período de seguimiento de 26 semanas. Antes de que este procedimiento se pueda implementar clínicamente, estudios más grandes deben llevarse a cabo para refinar los protocolos de tratamiento.